Gestión del Conocimiento para la innovación

La Cámara de Comercio de Bogotá continua entregando información muy actualizada desde sus cursos en línea, desde donde promueve el  emprendimiento para personas y organizaciones que quieran empoderarse de la tecnología aplicada a entornos empresariales. Esta vez puso a disposición un contenido especializado denominado “Gestión del conocimiento para la innovación“.

Dividido en dos módulos, el curso se desarrolló primero recorriendo todo el contexto de la información, la gestión del conocimiento aplicado y el impacto que esta tiene en los procesos de innovación, mostrando y demostrando porque las empresas y las personas deben hacer este tipo de gestión especializada, para garantizar en el tiempo los tangibles e intangibles del conocimiento, así como su debido usufructo. Se aclaran conceptos para aquellas organizaciones que no tengan claro la complementariedad entre conocimiento e innovación, y muestra muchos ejemplos desde la práctica, donde ya hay evidencia visible de la poderosa sinergia que estos dos procesos llevan y conllevan al devenir empresarial y económico de las organizaciones.

El segundo módulo se centró en el capital y la propiedad intelectual, donde quedó claro el proceso que se surte para adelantar ante las autoridades nacionales los procesos y procedimientos relacionados con las nuevas creaciones, los signos distintivos, los secretos industriales, y todo el contexto legal que involucra los derechos de autor para los temas relacionados con la innovación propiamente dicha. Se evidencia que las llamadas tecnologías de punta y emergentes están mas relacionadas que nunca con la Innovación exponencial, desde donde las estrategias de transformación digital, la gestión del talento y la cultura digital digital, muestran la importancia a tener en cuenta dentro de los procesos de innovación y diversificación de productos y servicios.

Una nueva certificación para el suscrito, que avala directamente las iniciativas que adelanto desde la mentoría en gestión del conocimiento e innovación, y que permiten confirmar la gran importancia que estos temas tienen, han tenido y tendrán en el impacto de las organizaciones. Hoy en día se relaciona más la gestión del conocimiento con la innovación, la creatividad, las redes, lo social,  y las personas como centro del desarrollo de sistemas para su gestión,  que con el uso mismo de tecnologías para el despliegue y control de las interacciones resultantes. Así aparece entonces  la necesidad sentida de organizar los tangibles e intangibles del conocimiento, en procura de asegurar la debida cadena de valor que mantengan dicho capital intelectual en la guarda correspondiente, identificando, valorando y gestionando los activos de información y conocimiento al interior de las organizaciones, frente a las dinámicas de manejo del personal orgánico, y su alta rotación institucional.

En el acervo popular se dice que “camarón que se duerme se lo lleva la corriente“, pero en estas épocas de celeridad tecnológica y científica – desde mi personal punto de vista – “camarón que se duerme desaparece inexorablemente del ecosistema al que pertenece“. En otras palabras las organizaciones que no hagan gestión del conocimiento e innovación tienden a desaparecer por cuenta de las mismas dinámicas de la modernidad. Las empresas, personas y organizaciones que deseen pervivir en el tiempo, deben explorar – desde el conocimiento tácito – todas las competencias e información que tienen y mantienen las personas en sus devenires profesionales, posibilitando el conocimiento explicito disponible en patentes, manuales, guías, directrices y todos aquellos recursos que aporten a nuevos conocimientos por y para las organizaciones.